martes, 25 de marzo de 2014

“PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS DE LA EDUCACIÓN ENTRE LOS ANTIGUOS MEXICANOS” *ensayo



“PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS DE LA EDUCACIÓN ENTRE LOS ANTIGUOS MEXICANOS”

La educación es un proceso exclusivo del ser humano,
 lo cual hace distinguirlo de los demás seres vivos. K.V.
La educación siempre ha sido esencial para una cultura, para cumplir nuestras metas, para preservarla, para vivir en armonía, para enseñar, para preparar a niños y a jóvenes para que puedan desenvolverse en la vida, para madurar con valores, etc;  Es tentativo pensar que desde la antigüedad había educación formal en México, prueba de esto es su arquitectura, su potencial económico, su urbanismo, su arte, entre otros; pero por la poca información arqueológica, sabemos más acerca de los mexicas que de cualquier otra cultura.
Pero si realmente hubo educación entre los antiguos mexicanos ¿no sería importante conocerla y reflexionar sobre sus características? Por esta razón, el presente ensayo tiene como propósito dar a conocer las principales características de la educación antigua en México y compararla con la educación actual para reflexionar sobre nuestro pasado y no cometer los mismos errores pero sí  aprovechar todas las buenas estrategias usadas en ese tiempo.
Este ensayo se creó con ayuda de testimonios de sus huehuetaltolli “pláticas de los viejos”, información en legua náhuatl recogidas después de la conquista por Olmos y Sahagún y otros testimonios que escribieron en lengua latina, los cuales fueron prestados de tres importantes lecturas.
Entre los mexicas, las escuelas eran especies de templos y su función principal era dar culto a los dioses; en la actualidad, las escuelas son centros de educación cuyo propósito principal es que el alumno aprenda y pueda llegar a ser competente para desenvolverse en esta sociedad; la educación ya no es religiosa, ahora es laica, aunque hay algunas escuelas privadas que vinculan las materias con religiosidad.
En mi opinión está correcto ese cambio, porque en ese tiempo nuestros antepasados eran politeístas y adoraban a muchos dioses, pero actualmente en nuestro país, aunque no hay multitud de dioses, hay muchas religiones y la religión ha pasado de ser una institución de unión y respeto entre muchos, a ser un obstáculo para la paz y amor entre las personas, y si en este momento todas las escuelas fueran de carácter religioso, podría formarse un gran problema entre los actores de la educación y se perdería el verdadero propósito de ésta.
Aunque en ese tiempo el impacto era positivo porque los alumnos eran orientados al servicio, la conservación y mantenimiento de los templos; a tener correctas relaciones con los semejantes y el respeto a sí mismos; el amor a su cultura y que debían defenderla a pesar de que eso les costara la muerte; los educandos eran motivados a hacerlo para sus dioses, por eso lo hacían con excelencia; hasta incluso algunas mujeres daban su vida por amor a sus dioses, se sacrificaban de una manera dolorosa o los padres a los cuarenta días dedicaban a sus hijos para el servicio o sacrificio de su dios.
Ahora los estudiantes no quieren ayudar a limpiar ni una parte de la escuela, a veces ni sus propias casas, no aman a su patria, lo podemos notar en los homenajes, porque los alumnos a veces no saludan a la bandera o si saludan lo hacen de mala gana, no quieren participar y prefieren no llegar a los actos cívicos; no respetan a sus compañeros, se golpean entre sí o incluso se dañan con palabras; los alumnos tienen poca motivación y aunque sabemos que no podemos inculcarles una religión o amor a Dios (hay otras instituciones para hacerlo) podemos buscar diferentes estrategias para que ellos puedan hacer las cosas correctas por amor y respeto a su patria y a sus compatriotas, podemos tomar algunas características de los antiguos maestros.
El maestro náhuatl era considerado como ayudador, remendador, guía, orientador, sabio, una figura especial, un espejo, un ejemplo, la luz y un camino a seguir; las funciones que desenvolvía era la de amonestar, hablar siempre la verdad, hacer sabios, abrir los oídos, iluminar, guiar, de hacer ver los defectos, hacer cuerdos y cuidadosos, hacer fuertes los corazones, ayudar, remediar, confortar, humanizar el querer de la gente que atiende, enseñar de manera estricta cómo han de vivir, obedecer a las personas, respetarlas, lo que es bueno y lo que es malo hacer: que deben huir de la perversión y la ambición, y que deben seguir la prudencia y la cordura.
Habían dos clases de maestros: los que hacían que los alumnos tomen un rostro, lo desarrollen, lo conozcan y lo hagan sabio y los que lo muestran humanizando el querer de la gente y haciendo fuerte sus corazones, pero ambas clases tienen gran impacto en la sociedad, refiriéndose como “el rostro y el corazón” lo que hoy llamaríamos fisionomía moral y principio dinámico de un ser humano.
Con esto podemos ver la perseverancia que tenían los maestros y lo interesados que estaban en que los alumnos aprendieran y fueran personas sabias y respetuosas en la sociedad; en estos días hay maestros que en vez de ser un buen ejemplo en las escuelas se ha convertido en un mal ejemplo e incluso son pocos los maestros que realmente se preocupan por sus alumnos y los amonestan de manera constantes para que sean alumnos ejemplares y de excelencia. Pienso que hay que reflexionar sobre este aspecto, porque a veces deseamos tener una sociedad diferente pero no hacemos nada para eso, y como alumnos en formación, podemos cambiar la historia y tomando el ejemplo de estos sabios maestros.
Aunque la responsabilidad no es totalmente del maestro, tanto la escuela, la familia como la sociedad inciden en la formación moral de los adolescentes; en ese tiempo los gobernantes estaban preocupados por la multitud; por ejemplo entre los mexicas, según un texto escrito por Frai Diego Duran, nos dice que aunque México estaba en orden, se vivía tranquilamente, el rey Motecuhzoma Ihuicamina decidió establecer normas claras para que los demás reyes que gobernasen después de él hicieran lo mismo o quizá mejoraran esas reglas; ordenaron que hubiesen escuelas en todos los barrios donde se ejercitasen a los alumnos a la religión, buenas costumbres, ejercicios de guerra, trabajos corporales, ayunos, disciplinas, velar de día y noche, etc.
De la misma manera ordenó que hubiera maestros hombres, ancianos, que los exhortara, disciplinara, que no les dejara perder el tiempo y que estos mozos se guardaran en la castidad y que se ocuparan en ejercicios ordinarios. Ahí se puede notar el interés de las autoridades, porque sabían que los niños y jóvenes serían el futuro del mañana, hoy por hoy, también estos personajes son el futuro del país pero no se pone suficiente atención en ellos, hay pocas escuelas en México y aunque las escuelas han crecido en cantidad hay disminuido en su calidad.
Otro punto que se puede observar, es que no hay una preocupación en el tiempo del adolescente como este gobernador, al contrario bombardean a los estudiantes con muchas cosas en la televisión, sólo por dinero, por publicidad, por avaricia; a veces queremos que los niños en el futuro sean jóvenes ejemplares pero nosotros no damos el ejemplo, al contrario en la radio y en todos lados percibimos inmoralidad hasta de los adultos. Tampoco se preocupan por su salud, por su servicio, cada día la sociedad se está convirtiendo en suciedad y ya no hay buenas costumbres, lo que si hay es guerras pero entre los mismos hermanos.
Otra figura de ejemplo entre los aztecas, eran los artistas de los trabajos de plumería “amantécatl”, los comerciantes “pochtecas”, como futura maestra de secundaria, sé que los adolescentes toman modelos a seguir para ser como ellos, para  que lleguen a formar su personalidad, entre los mexicas, los artistas eran reconocidos como ejemplos, como dueños de un rostro y un corazón, un rostro que sabe hacer que las cosas se logran, un corazón recto, corazón respetuoso a dios, el modelo de varón maduro en ese tiempo era las personas que tenían un corazón firme, resistente, un rostro sabio; en el presente el varón maduro entre los jóvenes y niños ha sido distorsionado, los modelos a seguir son cada día peores.
El trabajo entre los mexicas era visto como algo natural del ser humano, no era tomado como una carga y hasta pensaban que en el futuro servirían y seguirían trabajando para sus dioses, pero ahora se ve como una tortura, hasta los mismos padres, maestros, directivos dicen que el trabajo es pesado y aburrido y cada día nos hacemos más “flojos” y con las enfermedades que han surgido con la comida chatarra que venden en la escuela, calle y dan en la misma casa, así hasta menos trabajadores nos hacemos porque nos sentimos cansados, adoloridos, enfermos, etc;
Los padres también son responsables de la educación de sus hijos, aunque no es una educación formal, podría ponerse en primer lugar, ellos son el primer ejemplo para sus herederos, pero muchas veces ellos también dan una mala educación, les dan que vean cualquier cosa en la televisión con tan que no molesten, a los maestros, en vez de ser visto como una figura especial es visto con mucho desprecio y poco interés y los alumnos aprovechan eso para faltarles al respeto, y los papás los defienden a ellos en lugar de poner el lugar que se daba en nuestra antigüedad, ellos mismos consagraban a sus hijos al templo, los instruían, les enseñaban, los animaban y los encaminaban al camino del bien.
Antes del siglo XVI el tipo de educación era por conocimiento empírico, ó sea que eran adquiridos por medio de la experiencia; de manera formal habían viarias clases de escuelas, cuatros escuelas entre los mexicas: el calmecac, el telpochcalli, la ichpachcalli y el cuicacalli. 
En el calmecac (“lugar de la hilera de casas”) en esta escuela se daba prioridad a la enseñanza de tipo intelectual, los alumnos recibían una preparación para que pudieran tomar cargo en actividades de dirección en diferentes campos, en lo político, en las actividades de la alta tecnología, en materia religiosa; por eso era fundamental el manejo de los calendarios, aprendizaje de los cantares, la interpretación de sueños y mitos, etc; eran pocas escuelas de éstas porque era propuesta para la nobleza (pero no de manera exclusiva), porque los estudiantes ocuparían lugares importantes, había siete en toda la ciudad, tenían una reglamentación estricta, los alumnos debían de ser castos, vírgenes y evitar la carnalidad, para ellos la vida era dura y eran sometidos a estricta vigilancia.
Hoy en día, no todo es malo, porque en ese tiempo los alumnos no elegían donde estudiar, siempre tenían que estar sumisos y hacer todo lo que los maestros querían aunque no estuvieran de acuerdo, tenían que trabajar en la escuela de una manera pesada, guardarse de muchas cosas y tenían mucho temor. Ahora los alumnos escogen lo que quieren estudiar, si no están de acuerdo con alguna argumentación del maestro, según la enseñanza moderna, ellos ya pueden dar sus argumentaciones sobre ese aspecto que les pareció deficiente para que ambos puedan aprender en un círculo de enseñanza-aprendizaje.
En el telpochcalli (“casa de jóvenes”) primeramente se estudiaba lo relacionado al desarrollo de las habilidades del joven para la guerra y la caza, aunque otros era enseñado en las variadas artes de los toltecas, a ésta iban casi todos los plebeyos, habían varias de estas escuelas, existían como diez o quince en cada barrio. Desde que entraba el niño a la escuela, le ordenaban barrer, encender el fuego y luego hacían que empezara la penitencia, en la noche cantaba allí donde vivía con los demás. Tenían más libertades que los que estudiaban en el calmecac, cuando eran jovencillos los llevaban al bosque, los hacían cargar a la espalda troncos, quizá uno o más y así los probaban para elegir si iría a la guerra o si sólo cargaría escudos.
Ahora aunque se pueden ver poco disposición de los alumnos para ayudar y para respetar a sus superiores, hay muchas virtudes que tiene la escuela actual, ahora no tienen que trabajar para poder estudiar, pueden dedicarse al estudio y posteriormente pueden trabajar, hasta incluso se han dado becas a muchos estudiantes para que puedan lograr sus metas, tampoco tienen que participar en la guerra de forma obligatoria, al menos que el elija ir a alguna de las escuelas para ser militar.
La ichpachcalli (“casa de doncellas”) posiblemente habían varias de ellas, dedicadas a distintos dioses, donde las doncellas tenían que vivir en total castidad para servir a Dios, las labores que tenían que hacer era barrer, regar el templo, hacer la comida con lo recolectado de las ofrendas tanto al ídolo como a los ministros del templo, cada mañana. Entraban entre los doce y trece años con el cabello trasquilado pero a partir de ahí se dejaban crecer el cabello, los preparaban para ser mozas de penitencias.
Aquí se pueden ver aspectos positivos entre las mexicanas, ellas estaban dispuestas a servir a sus dioses aunque tendrían que sacrificarse, eran castas y sumisas; pero una de las desventajas es que a la mujer se le trataba con desigualdad, porque si ellas deseaban estudiar para tener algún cargo mayor no podrían, ellas tenían que hacer las labores de la casa sin despreciar lo que se les dio.
“Pero qué es lo que podré decir, sino poco y malo, como mujer, en fin, que no tiene por oficio ejercitarse en meditas las palabras para que las atiendan” (Alba, 1985, pág. 47)
El cuicacalli (“casa del canto”) era más mencionado, ahí iban todos los alumnos de las escuelas a diario a recibir conocimientos sobre el canto y la danza que se consideraban actividades no sólo artísticas sino también maneras elevadas de culto religioso y el canto era una vía de transmisión del conocimiento, sobre todo histórica. También se introducía al individuo al trabajo comunal, se distribuían a los alumnos, desde niños, las actividades tributarias; los alumnos iban diariamente desde su escuela a  recibir instrucciones de canto y danza.
Esa es una gran escuela y sería fantástico que todos los alumnos lleguen a una casa de canto, pero al menos en la actualidad aunque no llegan a un curso exclusivo para el canto y la danza, en las escuelas se dan clases de canto, danza, entre otros grandes talleres para que el niño y el joven se puedan ejercitar tanto en el arte como en el deporte y sean un ejemplo a seguir a lo largo de la historia.
Tenemos que reflexionar sobre la situación actual de nuestra sociedad y de la gran influencia que tienen en nuestros estudiantes; sobre el tipo de ejemplo que debemos ser para los niños y jóvenes y así lograr un mejor futuro; el tipo de gobernante que debemos elegir, el tipo de padre que debemos crear, la manera en que los alumnos se puedan dirigir, las formas en que los medios masivos de comunicación deben impactar y sobre todo, como futuros maestros, el gran guía que debemos anhelar ser. Hay que aprender de las principales características de los antiguos mexicanos para apreciar la gran organización y los admirables valores que tenían estas impresionantes culturas.

BIBLIOGRAFÍA:
López Austin, Alfredo (1996), "La enseñanza escolar entre los mexicas", en Mílada Bazant
Alba Ixtlilxóchitl, Fernando de (1985), "Discursos a las mujeres dedicadas a los templos", en Pablo Escalante (antolog.), Educación e ideología en el México antiguo, México, SEP/El Caballito (Biblioteca Pedagógica), pp. 44-49.
León-Portilla, Miguel (1958), "El concepto náhuatl de la educación", en Siete ensayos sobre Cultura náhuatl, México, UNAM, pp. 57-81.


Asignatura:
La Educación en el Desarrollo Histórico de México I.



LA ENSEÑANZA ESCOLAR ENTRE LOS MEXICAS. *Biombo


-EDUCACIÓN-DISCIPLINA-CASTIGO-CEREMONIAS-GRUPOS SOCIALES-RELIGIÓN


CUICÁCALLI


*Institución que introducía al individuo al trabajo comunal, ahí se distribuían a los alumnos, desde niños, las actividades tributarias.        
*Realizaban actividades que sobrepasan una preparación puramente artística, sino que eran consideradas como formas muy elevadas de culto religioso y el canto en particular, era considerado como una vía de transmisión del conocimiento, sobre todo histórico.
 *Los alumnos iban diariamente desde su escuela a  recibir instrucciones de canto y danza.




CALMÉCAC

(“Lugar de la hilera de casas”)

*Era destinado para la nobleza aunque no de forma exclusiva.
*Había 7 en toda la ciudad.
*Tenían que ser castos, era muy importante la virginidad y evitar la carnalidad en ellos.
*Se preparaban en todos los campos que les permitían actividades de dirección.
*Se les impartía educación en el campo político, en las actividades de la alta tecnología, en materia religiosa era fundamental el manejo de los calendarios, porque ocuparían lugares importantes.
*Para ellos la enseñanza era más dura, eran sometidos a estricta vigilancia.

TEPOCHCALI

(“Casa de jóvenes”)

*  Escuela a la que iban casi todos los plebeyos.              
*Habían muchas escuelas, existían de 10 a 15 centros en cada barrio.  
*Se hacía hincapié en el trabajo y en las actividades militares.
*Al entrar el niño, le ordenaban barrer, encender el fuego y luego hacían que empezara la penitencia, en la noche cantaba allí donde vivía con los demás. 
*Tenía más libertades que los nobles. 
*Cuando eran jovencillos los llevaban al bosque, los hacían cargar a la espalda troncos, quizá uno o más y así los probaban para elegir si iría a la guerra o si sólo cargaría escudos.


ICHPACHCALLI

(“Casa de doncellas”)

*Es posible que fuera varias escuelas, dedicadas a distintos dioses.      
*Las jóvenes vivían en castidad.
*Sus deberes eran labores domésticas (barrer, regar el templo y dar de comer a los ídolos y a los ministros del templo).
*Las mujeres entraban con el cabello corto pero dentro se dejaban crecer el cabello.
*Se registraban de edades de los 13 a los 14 años
*Los preparaban para ser mozas de penitencia.





Elaborado por:
 Karla Stephanie Villatoro Grajales. No. 29.  Segundo de Español.

Cruzada educativa en "Los congresos de instrucción y sus principios rectores."