Análisis de la lectura “el alfabetismo dentro y fuera de la escuela” escrita por Lauren B. Resnick.

Esta lectura no centra su objetivo en darnos sólo una información, sino que también nos permite reflexionar sobre la situación actual de nuestro país y del mundo. Estoy en completo acuerdo con este texto, ya que los niveles de alfabetización se sacan por el simple hecho de las personas que asisten o no a una escuela, y como la autora menciona, la escuela es sólo una de las múltiples formas para lograr la alfabetización, ya que éste, el alfabetismo, es un conjunto de prácticas y habilidades adquirida que nos caracterizan como individuos, y que éstos se ven alterados dependiendo del contexto social en el cual nos encontramos, especialmente en donde las personas escriben y leer. El alfabetismo es útil a lo largo de nuestra vida, se puede adquirir con la teoría y la práctica, y éste nos ayuda a desarrollar nuestras habilidades comunicativas, porque no se puede dejar de un lado a aquellas personas que adquieren esos conocimientos y habilidades fuera de la escuela, como el título mismo lo menciona de manera indirecta.

Estoy en desacuerdo, que la lectura sólo se desarrolla en la escuela, pues hay personas que por necesidad tienen que aprender de diversas maneras, tampoco estoy de acuerdo con dar prioridad a los alumnos más habilitados o que casi nunca hay oportunidades de trabajar junto a otros individuos más habilitados, pues como nuestro artículo tercero nos dice que todos, por ser individuos, tenemos derecho a recibir educación y así debería de ser, sin inequidades.

En la actualidad, a las personas con mayor escolaridad les dan más oportunidades de trabajo, mejores condiciones de vida, aunque muchas veces los alumnos sólo pasan de niveles sin aprender nada, y hay otras personas que saben mucho, también leer y escribir, pero no los toman en cuenta para un trabajo, por el simple hecho de no tener papeles ni certificados, por lo tanto creo que hay discriminación y desigualdades en nuestro país, aunque en todos los rangos a los de la clase media o alta, nos beneficia, pero eso no debe ser.

Y en conclusión, debemos dejar atrás el pensamiento de que el alfabetismo es un conjunto de actividades y poner en nuestras mentes y corazones que es una forma divertida y cultural, ya que en las escuelas, se encuentran aisladas de este concepto, de la forma cotidiana del lenguaje escrito y como maestros, puede ser muy positivo en nuestra vida, porque podemos observar que tenemos una tarea muy importante, “alfabetizar a nuestros alumnos”, que logramos fomentar en nuestros presentes o futuros alumnos el gusto por la lectura, sin imponerles algo sistemático, cotidiano o rígido, sino que lo hagan por amor y pasión, más que por tarea u obligación, que no simplemente se quede como una lectura, sino que se desarrolle el poder de la imaginación, la reflexión y la comprensión.