REFLEXIÓN DE LA PELÍCULA: “Los dos hijos de Francisco"

Esta película nos deja un gran mensaje, que el cumplimiento de un sueño nunca es fácil, pero que con mucho esfuerzo y sacrificio se puede lograr, ya que estos dos jóvenes, a pesar de pertenecer a una familia pobre, con mucho trabajo sobre sí mismos y con el apoyo de su padre, pudieron lograr lo “imposible”, convertirse en estrellas de la música y llegar a ser conocidos a nivel mundial a pesar de los grandes obstáculos que se les presentaron. 

Francisco, un padre de familia, considerado como “loco”, porque tenía un sueño y una esperanza, convertir a su hijo mayor, Mirosmar, en un músico famoso, para que pudieran tener una mejor vida de la que él les había podido dar, no tuvieran que ser “esclavos” para siempre y se convirtiera en “alguien en la vida”; para ello, motivaba siempre a su hijo, tanto que un día el niño decidió cantar en la feria del pueblo, aunque en su primer intento quedó paralizado, su canto no fue muy agradable y causó risa en el público, el pequeño no se dio por vencido  y su padre, tampoco, sino que le regaló una armónica para motivarlo. Francisco gestionó una escuela para la comunidad, habló con el prefecto para que sus hijos pudieran estudiar, aprender a leer y escribir para crear sus canciones, ya que él no sabía.

Mirosmar tomó la armónica, pero como no tenía un maestro que le orientara, sus primeros intentos no fueron exitosos, pero se las fue ingeniando escuchando el sonido del agua y las canciones en la radio, así que después de mucha dedicación, logró tocar algunas melodías agradables que alegraron a su padre, de tal manera, que vendió su pistola y un cerdo para poderle comprar un acordeón a su hijo, lo cual era mucho más complicado tocar, pero el pupilo seguía intentado, hasta que a su padre se le ocurrió una idea, pedirle a un músico en una fiesta que le enseñara a su hijo, el músico al principio se negó pero al ver a Mirosmar con el acordeón se acercó a él y le dijo que sólo le enseñaría una vez, el niño aprendió.

El padre le compró una guitarra a su otro hijo, Emival, para que formaran un dueto, los dos aprendieron rápidamente. Posteriormente, el abuelo les quitó sus tierras dado al comportamiento de Francisco, tuvieron que viajar a una ciudad desconocida, los hijos trataron de apoyar yendo a tocar en la parada de un tren ganando dinero pero no lo suficiente; luego se encuentran con el Sr. Miranda que promete llevar a los niños a una gira por todo Brasil para hacerlos famosos, y lucra con ellos, los trata mal y los lleva a casa mucho tiempo después del acordado, los padres se enojan y deciden ya no mandarlos con él, Francisco busca otras opciones, pero no las encuentra, sólo se encuentra con el Sr. Miranda arrepentido y le da otra oportunidad.

El Sr. Miranda trata bien a los niños y los hace famosos, pareciera que todo va bien pero el mayor obstáculo se le presenta en ese momento, en el camino de regreso a casa, sucede un accidente automovilístico, Emival falleció. Esto pareciera ser la bomba que rompería en pedazos los sueños de Francisco y su familia, Mirosmar ya no quiere su acordeón, pide a su padre que lo venda y lo cambie por una televisión para su madre, su padre está destrozado y desanimado al igual que toda su familia, pero no vende el acordeón, lo conserva.

Tiempo después, Mirosmar se levanta y comienza a tocar, ¡qué bueno que ante la adversidad, su padre no se rindió y no vendió el acordeón!, su hijo participa en un concurso y gana, entre los premios estaba el grabar un disco, el cual sería distribuido en todo Brasil, ¡sí, lo logró!, pero no era el fin, comenzaron otros problemas, el disco no se vendía muy bien, así que no podía darle una buena vida a su nueva familia, la esposa era la que tenía que trabajar, estaba a punto de darse por vencido y dedicarse a otra cosa, pero su esposa lo animó a seguir con su sueño, su hermano Luciano le dijo que quería grabar un disco con él, lo cual lo animó y ambos se apoyaban el uno al otro, hasta que grabaron un disco juntos.

Pero la cinta no lo lanzó la disquera, sólo les dio el disco a ellos, eso les causó mucha tristeza, se lo contaron a su padre y en lugar de escuchar palabras de desaliento, Francisco tomó entre sus manos el disco y lo escuchó orgulloso, después llevó la cinta a la radio local, invirtió todo su dinero en fichas para teléfono público y pedía constantemente que pusieran la canción de sus hijos, pidió apoyo de sus compañeros de trabajo para que hicieran lo mismo, de esa manera sus hijos fueron conocidos y vendieron un millón de discos, hicieron conciertos y se dieron cuenta que el loco no era su padre, sino ellos.

En conclusión, esta historia me hizo reflexionar que muchas veces estamos llenos de sueños, pero para cumplirlos nos enfrentamos a miles de obstáculos, sólo hay dos caminos, dejar el sueño o vencer los obstáculos, el primer camino es mucho más fácil pero seguiremos igual, el segundo más difícil pero trae grandes beneficios, así que nunca debemos rendirnos, sino que debemos esforzarnos para alcanzar nuestras metas y nuestros objetivos, no importa quién se interfiera en el camino, con determinación y el apoyo de otras personas que están dispuestos a apoyarnos y animarnos podemos lograrlo. De la misma forma, debemos animar a nuestros alumnos para que alcancen sus sueños y se conviertan en “alguien en la vida”, motivarlos y animarlos para que nunca se rindan, sino que se luchen por lo que desean alcanzar.